LA LIBRE DETERMINACION DE LOS PUEBLOS Y LOS MAPUCHE ( O SUGERENCIAS DEL COMO AYUDAR)

MANDAR OBEDECIENDO

Desde un tiempo a esta parte el pueblo mapuche ha venido desarrollando una lucha por reivindicaciones históricas contra todas las formas de dominación que actúan en su territorio. El estado, con su gobierno y congreso de turno;el desarrollo económico del capital, con sus haciendas, empresas forestales, eléctricas, etc; y el militar, con su frontera interna a conquistar. A eso debe sumarse la lucha cotidiana por el respeto a sus tradiciones, su lengua y su organizacion. Ralco, Temulemu, Lumako, Lleu-lleu y otros son la expresión mas radical y valiente de un pueblo que se reconstruye. Es por estas condiciones que la resistencia mapuche puede entenderse como un CONFLICTO INTERCULTURAL Son dos culturas las que se oponen, pero debido a que una, la chilena(occidental, desarrollista, cristiana y etnocentrica por añadidura) , intenta imponer un modo de vida, un modelo de producción y consumo y una tradición. Y mientras tanto, aquellos sectores sensibles al conflicto (me refiero a los que apoyan la lucha, la izquierda no tradicional y no a otros) , intentan, con aciertos y errores, comprender la situación del pueblo Mapuche y de atinar a ayudar. El problema es que generalmente nos faltan elementos que permitan generar una comunic-acción efectiva. Esto se deriva de distintas causas, pero fundamentalmente me refreiré a dos:

1. La ceguera de la izquierda chilena (especialmente la tradicional) , que sostiene la idea de que los mapuche deben desarrollarse como los chilenos, porque son pobres del campo, sin preguntarles si quieren este desarrollo u otro. Esto significa que entienden a los mapuche solo como un factor mas dentro de la lucha contra el sistema y no como un proyecto de sociedad alterno.

2. El paternalismo en el quehacer político, que busca la conducción de los conflictos, sea para engrosar la cuenta de votos en las elecciones o para construir nuevas alternativas, sin comprender completamente su condición de pueblo distinto, con un camino de construccion de lucha propia y autónoma. Esto ha producido históricamente la entrada de dirigentes externos que trasladan los conflicctos desde las comunidades hacia algunas instituciones o grupos urbanos, sin respeto a los dirigentes locales, lo cual termina por centrar la lucha en la firma de uno o dos "tratados de paz" , sin consulta a las comunidades. Esto no implica que allá ellos y acá nosotros y que les valla bien, sino que el proceso desatado por la lucha de las comunidades nos obliga a comprender que la conducción del movimiento Mapuche debe de estar en manos Mapuche y que nosotros, si queremos apoyar esta lucha, debemos crear un accionar coherente con el respeto a la LIBRE DETERMINACIÓN DE LOS PUEBLOS, es decir un apoyo orientado por las condiciones políticas concretas de la lucha Mapuche y no por un simple romanticismo buena onda que incluso puede entorpecer a las comunidades en conflicto. Por esto, en medio del conflicto que se desarrolla, estemos atentos a no tener un protagonista en la lucha de otros, sobre todo cuando el verdadero conflicto se encuentra en el campo y esas son las voces que deben de ser escuchadas. Siempre es posible ayudar, pero primero hay que preguntar cual es un aporte real a la lucha del campo. Así sabemos que podemos hacer una que otra acción directa, recolectar alimentos, informar a nuestros compañeros, etc., cuidándonos de no sobrepasar las acciones de los propios Mapuche y de no centrar la atención en la declaración de nuestras organizaciones, en nuestras firmas o tiendas, sino en la demanda Mapuche.

un shileno